Tareas en verano.

Tareas en verano

Los veranos son complicados, la familia y el trabajo se hacen casi imposible. Los horarios no ayudan, los precios de las actividades de los pequeños son altos y en muchas ocasiones (como ya hemos hablado) tenemos que hacer verdaderos milagros para sacar las semanas adelante, la logística se vuelve el principal tema de conversación.

En esta ocasión os vamos a compartir nuestras discrepancias sobre el tema de las tareas en verano.

Hay dos posturas muy claras, la primera habla del descanso necesario de los niños, de que este tiempo se debe dedicar a descansar, que los niños hagan lo que desean como recompensa al año de trabajo.

La segunda habla de que no dejen la dinámica que tienen adquirida de todo el curso, que el verano es muy largo y tanta desconexión le haría muy complicada la vuelta al colegio.

Nosotros después de hablarlo (os animamos a hablarlo y consensuarlo todo) hemos decidido coger la segunda opción. Pensamos que todo un verano sin hacer nada le puede perjudicar, se aburrirá y todo lo que hemos conseguido durante el año lo podemos perder.

Nos hemos organizado y le vamos a pedir a Tomás que dedique una hora al día a realizar diversas tareas sobre números, letras y una vez terminadas, le dejamos tiempo para colorear, dibujar…avanzar en estos aspectos pensamos que es indispensable.

Al principio no puso buena cara, pero al segundo día estaba encantado, son muchas horas sin saber qué hacer.

Tomás tiene problemas con la letra, le cuesta, su letra no es muy buena y todos estos ejercicios le están ayudando a mejorar poco a poco. Él, que es consciente de esto, se anima y se motiva viendo sus avances.

En el verano hay tiempo para todo, y que Tomás dedique una hora al día no le debe suponer ningún problema. Hemos tenido conversaciones con otros padres sobre esto y hemos encontrado de todo.

La semana pasada una pareja nos decía que en nuestras vacaciones no trabajamos, que desconectamos y no dedicamos ni una hora al trabajo. Nuestra respuesta fue que el verano es muy largo, que son muchas horas de ocio las que tienen los niños y que hay tiempo para todo.

El verano es para descansar, es cierto, es para desconectar, también es cierto, pero no es menos cierto que para un niño de 4 años puede hacerse una eternidad

Estamos seguros de que tenéis mucho que decir.

El artículo de nuestra bloguera Alicia López os puede servir de ayuda.

Un abrazo y gracias por estar ahí 🙂

Padres novatos