Quienes hemos tenido mascota de pequeños sabemos lo divertido que puede ser crecer con perros: las aventuras en los paseos, los juegos a todas horas en casa, el cariño y la complicidad de un mejor amigo… Perros y niños ¿una combinación perfecta verdad? Aunque debería ser así, no siempre las cosas salen como esperamos y ocurren malentendidos que pueden derivar en situaciones traumáticas. Para evitarlo, os traigo:
10 Consejos para niños que evitan problemas con perros y mejoran la convivencia
1.- Siempre pedir permiso a los dueños antes de tocar a los perros.
Aunque veamos a perros sueltos y nos parezcan amistosos, nunca hay que tocar perros que no conocemos, por ello, lo primero es preguntarle a su dueño si se le puede tocar.
2.- Si levantamos los brazos, puede que nos salten encima.
En el lenguaje canino, levantar los brazos invita los perros a saltar.
3.- Por el contrario, evitaremos que se suban si les damos la espalda.
Si el perro salta o va saltar, lo único que tiene que hacer el niño es darse la vuelta, eso automáticamente hará que el perro no le salte.
4.- Si les abrazamos, pueden sentirse agobiados.
No a todos los perros les gustan los abrazos, hay que tener cuidado especialmente si el perro no es tuyo. Las caricias suaves por el costado son mejor opción.
5.- Nunca debemos correr de frente hacia los perros, acercarnos mucho a su cabeza ni abalanzarnos encima de ellos.
Sobre todo con los perros que nos encontramos por los parques, porque algunas mascotas más tímidas o inseguras pueden sentirse intimidadas y responder frente a estos comportamientos.
6.- No nos acercaremos a un perro que esté suelto, atado sin el dueño, cuidando a sus cachorros, o dentro de algún coche.
Frente a estas circunstancias lo mejor es dejarles tranquilos, y si hubiera algún problema con algún perro, buscar al dueño.
7.- No es conveniente jugar bruscamente con los perros, alterarle puede tener consecuencias negativas inesperadas.
Si quiero que mi perro sea equilibrado y pueda jugar tranquilamente, no le altero fomentando juegos nerviosos.
8.- Al agacharnos les invitamos a acercarse.
Fijaros que los niños están más a su altura que los adultos, por ello, hay que enseñarles a darse la vuelta si no queremos que se acerquen a saludar.
9.- Bostezando les trasmitimos tranquilidad.
Ellos también utilizan el bostezo como señal de apaciguamiento con individuos de su misma especie y con nosotros cuando nos sienten muy tensos.
10.- Cuando veamos a un perro enfadado, permaneceremos quietos como árboles.
No levantamos la mirada y permanecemos con las manos pegadas al cuerpo. Pedimos ayuda a un adulto inmediatamente.
Sumara Marletta
Es adiestradora canina experta en re-educación de perros y dueños y autora de La niña que sabía de perros, el cuento infantil que enseña a los niños a entender y comunicarse con su perro; y Miriam educa a su cachorro, donde enseña a los niños cómo educar a su mascota.
Para saber más sobre educación canina visite www.consultoriacanina.com.
3 comentarios
Concuerdo con el titulo del articulo
Los niños y los animales es una combinación perfecto, pero debemos enseñar a los niños la empatia y hacerlos entender que es un ser vivo y que debe ser tratado como tal.
Mis perros son entrenados por los profesionales de
Perro asistencia, ellos me enseñaron lo importante de tratar a un perro con dignidad.
very informative article
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