Está llegando el final de las vacaciones para los más pequeños de la casa. Ha sido un verano muy bueno, lo hemos pasado realmente genial en familia. La familia es lo más importante.
Mi padre siempre me decía que las familias son el verdadero motor de la sociedad. En ellas debemos encontrar paz, consuelo, perdón, aceptación, comprensión…todo esto en muchas ocasiones, no nace de manera natural, hay que trabajarlo día a día. Ser constante es muy importante, un núcleo familiar fuerte garantiza la estabilidad de la familia.
Este verano hemos hecho eso, invertir en la familia, en primer lugar en la que formamos nosotros tres (pronto cuatro) y en segundo lugar en los abuelos, tíos, primos…
Tomás lo ha notado, ha tenido tiempo para todo y todos. Pero todo llega a su fin y pronto comenzará la rutina. A Tomás no le hace mucha gracia comenzar el colegio, es comprensible, a nosotros tampoco nos gusta volver al trabajo y menos cuando lo hemos pasado tan bien.
Este año hemos desconectado muchísimo, el campamento de verano de Tomás fue genial, al principio le costó pero al segundo día estaba totalmente integrado y disfrutando. Ha sido una experiencia positiva en la cual ha aprendido mucho. Por nuestra parte ha sido un tiempo extraño sin él, a cada momento estábamos pensando en qué estaría haciendo, si se lo estaría pasando bien…
Lo hemos aprovechado , es otra cosa que hemos descubierto. Desde que nación Tomás apenas hemos podido dedicarnos tiempo el uno al otro y es de vital importancia hacerlo.
Pues ese ha sido nuestro verano, como decíamos al principio, hemos podido dedicar tiempo a todos. Por cierto ha pasado muy rápido 🙂
Os animamos ahora que llega el fin de las vacaciones a compartir con nosotros qué tal os ha ido.
Os enviamos un abrazo muy fuerte y gracias por está ahí.
Padres Novatos.
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