La experiencia de crecer con perros es fantástica, y más si esa relación se establece desde muy temprano, no obstante, para el perro no todo es tan bonito y al principio es normal que se sienta desplazado. Para evitar males entendidos y broncas innecesarias os dejo estas pautas.
Consejos para familias con perros que esperan un bebé
1. Cambia las rutinas antes de la llegada del bebé
Para ello hay que tener muy claro qué cambios ocurrirán en la rutina del perro y empezar a llevarlas a cabo antes. Si el perro ya no tendrá acceso a determinados lugares de la casa, hacerlo desde mucho antes, si la dueña dejará de sacarle, que la otra persona empiece a compartir esa tarea meses antes.
2. No desplazar al perro
Aunque el bebé requerirá muchísima atención y cuidados, el perro sigue estando ahí y sus necesidades son las mismas. Si no puedes sacarle, habla con paseadores caninos que puedan realizar esta labor.
3. Fomentar un clima de independencia
Si de repente su dueña desaparece o pasa de él, sufrirá mucho. Cuidado con el hiper apego en esta fase. Un truco, utilizar juguetes interactivos y tener planeadas actividades en las que el perro juegue solo.
4. El bebé no debe ser algo negativo para el perro
Después de haber estado varios días fuera, el perro querrá atención especial al ver a su dueña, ¡dásela! Al volver a casa, saluda al perro, luego se le enseña el bebé sin forzarle a que se acerque, solo si él quiere. Si lo hace, dale premios, felicítale.
5. Asociar el olor del bebé con estímulos positivos
Mientras que la mamá está en el hospital, que alguien acerque a casa una prenda con el olor del bebé acompañado de premios y caricias. La idea de acercar un pañal usado del bebé al perro para que se lo coma es absurdo, arcaico y contra producente.
6. El contacto entre perros y bebés jamás debe ser forzado
Debemos respetar si el perro no quiere estar a su lado. Aprender sobre el lenguaje canino nos ayudará a convivir mejor.
7. Enséñale educación básica para la convivencia
Sentado, tumbado, no saltar sobre la gente, coger y soltar objetos, etc., todo eso será muy útil posteriormente.
8. Anticiparse a posibles problemas
Si el perro tiene cualquier problema de comportamiento, es recomendable pedir ayuda profesional.
9. Nunca dejar a los perros a solas con los bebés
Cuanto más pequeños, más supervisión es necesaria.
10. ¿Bebé y perro juntos?
Si el perro está bien cuidado y aseado, no pasa nada por tenerles juntos, de hecho, muchos estudios señalan los múltiples beneficios de esta combinación, incluso para la salud.
Es una etapa preciosa que pasa muy deprisa, disfrútala.
Por Sumara Marletta, psicóloga canina, madre de Miriam de 3 años y medio y de Natalia de año y medio. Autora de “La niña que sabía de perros” y “Miriam educa a su cachorro”
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La niña que sabía de perros, el cuento infantil que enseña a los niños a entender y comunicarse con su perro.
Miriam educa a su cachorro, enseñan a los niños cómo educar a su mascota.