Llega en verano, y con él el periodo de baños en la playa o piscina. Así que te vamos a contar por qué debes trabajar para que tu peque pase el verano sin flotador, en la medida de los posible. Todavía hoy se ven niños y niñas en las piscinas disfrutando del agua con sus familias con el flotador puesto. El flotador es un material que está en desuso e incluso prohibido en algunas piscinas.
Los flotadores no son una buena elección para que los pequeños aprendan a nadar; ya que se suelen poner no para que el pequeño aprenda a nadar, sino para que flote y pueda estar en el agua de forma independiente.
Los flotadores entrañan gran peligro en el agua porque generalmente producen un efecto de “tranquilidad”. Entrañan gran peligro porque es fácil que se voltee con el niño y quede boca abajo sin poder volver a la posición original, así como que se pinche.
Estadísticamente se producen más ahogados en las zonas donde el agua cubre menos. Esto es debido al uso indebido de material y al exceso de confianza generado. Además, los flotadores impiden la movilidad del niño en el agua, así como manguitos mal elegidos (muy inflados, muy grandes)
Si quieres disfrutar del agua en familia, olvídate del material “para que el niño flote” y piensa qué material es mejor para ese rato de diversión.
QUÉ MATERIAL ES MÁS ADECUADO
Hoy en día existe gran variedad de material auxiliar que combina diversión y aprendizaje. El objeto más común es el llamado “churro” o “patata”. Es un cilindro de poliestireno que permite gran cantidad de juegos y ejercicios, así como autonomía. Los manguitos del mismo material (no se pinchan) también son muy útiles, sobre todo los que llevan varios discos porque se pueden ir quitando en función del nivel del nadador. También se están empezando a ver unos bañadores que llevan integrados varias microcámaras de aire que permiten flotar pero sin impedir el movimiento. Estos son muy útiles para el aprendizaje de la natación de niños con capacidades especiales. No use chalecos que no lleven arnés porque si no éstos se suben a la cara del pequeño.
Básicamente, con un “churro” en la piscina puedes pasarlo en grande con los pequeños y ellos podrán realizar todo tipo de movimientos y ejercicios (delante, detrás, a caballito, etc) pero conlleva que los padres deberéis estar muy atentos en todo momento. Estamos eligiendo calidad y diversión y desechamos pseudotranquilidad y flotador.
Desde mi punto de vista como profesional, no hay mejor material que los brazos de papá y mamá-
Francisco Sánchez. Director LudoQua
Un comentario
No creo que la solución sea quitar los flotadores, hay tamaños específicos para gran grupo de gente, lo que no se puede es despreocuparse de los y las niñas, no son peligrosos si estas pendiente. Los flotadores en con agujero central son una forma de juego.
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