Nueva normalidad… llevamos semanas escuchando esa expresión sin saber muy bien a qué se refieren al cien por cien. En este artículo no vamos a dar respuesta a qué es, pero si os vamos a plantear algunas cuestiones que nos harán ver esa nueva normalidad como una oportunidad.
Superados ya los 50 días de confinamiento surgen muchas dudas de como volveremos a recuperar la normalidad. Se habla de fases de desconfinamiento, de nueva normalidad, de adaptación de la rutina, de recuperación de lo perdido… bonitas expresiones que poco aclaran cuál será el panorama después de esta pandemia, y eso es así porque nadie lo sabe con certeza.
Nos gustaría enfocarnos sobre las oportunidades que tendremos al terminar todo esto. La primera de ella es ver, leer y escuchar por los diferentes medios de comunicación como la contaminación de cielos, aguas y espacios naturales han mejorado, incluso hemos visto animales salvajes merodeando espacios urbanos.
Estos días se podía leer en El País lo siguiente: “No hay precedentes”, dice sobre esta mejora de la calidad del aire Miguel Ángel Ceballos, especialista en contaminación atmosférica de Ecologistas en Acción que lleva años monitorizando la calidad del aire en España. “Es excepcional y sin precedentes desde que arrancaron los primeros registros en los noventa”
Este hecho nos planeta algunas preguntas ¿Estamos cuidando de manera responsable nuestros entornos? ¿Tan perjudicial es la intervención de ser humano en los espacios naturales? La respuestas creo que están claras, a la primera pregunta es NO, a la segunda es SÍ…
El planeta es el principal beneficiado de este confinamiento al que el COVID-19 nos has llevado, parece que se ha quitado un lastre de encima y se estira alcanzando espacios que en tiempos anteriores le pertenecieron. Esto nos demuestra que no sabemos cuidar el planeta que hemos heredado y que debemos traspasar a nuestros hijos. Hemos abusado de él, lo hemos tratado mal, no lo hemos cuidado y se ha resentido.
En este tiempo se ha reiniciado, se ha recuperado del virus llamado ser humano, por eso no habrá una vuelta a la normalidad, pero si una a una nueva realidad, y no porque esté condicionada por mascarillas, guantes, geles o distancias de seguridad (que también) sino porque vamos a encontrar un planeta limpio y verde. Tendremos que analizar, detectar y solucionar qué hábitos de los que realizamos a diario llevaron al planeta a luchar por sobrevivir al ser humano.
Por eso desde aquí os animamos a que compartáis con nosotros qué debemos cambiar de nuestro día a día, seguro que entre todos lo conseguiremos.
Mucho ánimo, ya va quedando menos.
Editorial Babyradio