A todos los niños les gusta. Pero lo que a lo mejor no sabes son los beneficios de disfrazarse, coger la ropa de los mayores y colocársela para jugar un rato, pintarse la cara con el maquillaje de mamá, ponerse un fular o unos zapatos de tacón, un sombrero, una corbata o un delantal…
Cualquier idea es buena para cambiar durante un rato de rol y jugar a ser una persona diferente, dejándose llevar por la imaginación. Los disfraces en carnavales son una fantástica oportunidad para jugar con ellos.
Una vez pasado Halloween, y con los disfraces para carnaval asomándose ya por la esquina, es una de las mejores ocasiones para poner en marcha toda la imaginación desbordante de nuestros pequeños. Lo menos importante es el traje que escojamos, lo importante es divertirse, dejarse llevar y aprender jugando mientras representamos otro rol, otro personaje, otra identidad.
¿Por qué les gusta tanto disfrazarse?
Disfrazarse es uno de los juegos favoritos de nuestros hijos, o al menos uno de los que más les gustan, porqué a través de los disfraces y de los personajes que representan pueden ensayar diferentes papeles, emociones, sentimientos y ver el mundo desde otro punto de vista y hacer cosas que probablemente no harían porque no se les permite.
Lo comentábamos en uno de los artículos, en el blog, al disfrazarse, el niño da alas a su fantasía, a su imaginación y creatividad. En cualquier etapa, pero en especial de los 3 hasta los 6 años, el mundo del niño está reinado por la imaginación. Vemos como nuestros pequeños hablan con sus muñecos, crean situaciones e inventan personajes y escenas de todo tipo. Es una etapa donde reina la fantasía y la imaginación.
Disfrazándose de piratas, bomberos, policías, princesas, brujas, hadas o lo que sea que hayan escogido ser, les permite ser más valientes, más atrevidos o sentirse más protegidos. Su imaginación es el límite y debemos permitir que la exploren al máximo. Los disfraces en carnavales son una oportunidad única para experimentar.
¿Qué aprenden mientras juegan a disfrazarse?
- Disfrazarse es un juego muy positivo que les ayuda a aprender. Un juego educativo que permite a nuestros hijos:
- Desarrollar su creatividad e imaginación.
- Estimular la inteligencia.
- Desarrollar su vocabulario (en especial en niños preescolares)
- Liberar tensiones.
- Aumentar su confianza.
- Facilitar en pensamiento simbólico representando la vida de algún personaje de ficción, animal o de los adultos que le rodean.Y así, asimilar el mundo que les rodea desde otro punto de vista.
Queda poco ya para que los niños salgan a la calle vestidos de sus personajes favoritos. Pronto veremos cómo se les ilumina la cara al verse con sus trajes de princesas o con lo que hayan escogido en el cole.
Es un momento divertido y mágico, ser un gato, un pingüino o un payaso durante un día es un juego de gran importancia que, como hemos ido viendo a lo largo de este artículo, ayuda a nuestros hijos en su desarrollo cognitivo y emocional.
Sara Tarrés Corominas
Soy psicóloga infantil y escolar, madre de dos niños: uno de 3 años y otro de 9 meses, ellos son mi fuente de inspiración y mi motor diario.
3 comentarios
Nosotros creemos que es fundamental a la hora de jugar y divertirse que tanto niños como niñas jueguen a disfrazarse. Estos juegos fomentan la creatividad de nuestro pequeño, sintiéndose por un rato en su personaje favorito. Hace con estos juegos que comprendan situaciones diferentes y se pongan en el lugar de la otra persona. También hace que se relacionen y socialicen de una manera más fácil y divertida.
Es fundamental a la hora de jugar y divertirse que tanto niños como niñas jueguen a disfrazarse, creemos que es una actividad que deberían practicar mas a menudo.
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