Los bebés tratan de comunicarse con sus propios recursos: expresión facial, expresión corporal, sonrisas, gorjeos… Todos hemos escuchado alguna vez la frase “Quien no llora no mama”, ¿verdad? Y es que la comunicación es la base de la supervivencia! De esta forma, expresan sus necesidades y deseos para que los cuidadores podamos atenderles. Sin embargo, hay ocasiones en que nuestra intuición falla y no adivinamos fácilmente lo que les ocurre, y en estas circunstancias recurren al llanto para expresar su incomodidad, (hambre, dolor de boquita, pañal mojado…etcétera) Tanto padres como cuidadores no nos sentimos bien cuando escuchamos llantos continuados de un bebé y experimentamos como ellos cierta sensación de frustración.
Afortunadamente hoy en día tenemos herramientas para comunicarnos con nuestros bebés de forma efectiva mucho antes de que puedan hablar: la comunicación gestual, respaldada por más de treinta años de investigaciones a nivel universitario.
La idea es dotar a los pequeños de una herramienta de comunicación que les permita expresar fácilmente sus necesidades y deseos, sirviendo como puente de comunicación hasta la aparición del habla. Esta posibilidad de comunicación temprana es de gran utilidad para el día a día de los centros infantiles, y es por ello que se enseña en muchas escuelas de EEUU y muchos otros países del mundo.
Las escuelas infantiles que utilizan los signos para bebés logran un ambienta más tranquilo y relajado en las aulas. Así por ejemplo los bebés pueden comunicar que tienen hambre o por el contrario que se sienten llenos y no quieren más papilla, que están incómodos por un pañal húmedo o que sienten cierto malestar,dolor o sueño, entre otras cosas. Y no sólo eso, pueden expresar que ciertas actividades les encantan y quieren “más” o repetir “otra vez”, por ejemplo a la hora de jugar, contar cuentos o cantar sus canciones favoritas.
De esta forma se refuerza el vínculo entre educadoras y niños, ya que éstas entienden rápidamente sus necesidades y pueden satisfacerlas, se refuerza la comunicación positiva y se reducen frustraciones y rabietas.
Cuando los niños son más mayores se puede aprovechar para enseñarles comportamientos sociales de cortesía, como el pedir las cosas “por favor”, dar las “gracias” o pedir “perdón”, o incluso enseñar el concepto de compartir frente al típico “mío” que utilizan los pequeños con los objetos que les gustan. De este modo se reducen conflictos entre compañeros y se aprende a respetar a los demás y esperar con más paciencia el turno de cada uno, fomentando a la vez las habilidades de socialización y gestión de emociones.
Poco a poco se van sumando en España las Escuelas Infantiles que deciden apostar por este método y formarse para implantarlo en sus aulas. El pasado año 2012 la Universidad de Vigo comenzó un proyecto de investigación implantando los baby-signos en varias escuelas de la zona con excelentes resultados, (más información sobre la noticia en este enlace).
Varias escuelas del norte del país ya lo enseñan con normalidad a sus alumnos ya hay también algunas públicas y privadas de Madrid que lo practican totalmente convencidos de sus enromes beneficios. Este año se sumará también la primera escuela infantil de Castilla la Mancha que se certificará en la técnica con el Programa Cincodeditos.
Las familias reciben con gran entusiasmo la iniciativa, ya que refleja el interés de la dirección de estas escuelas por formarse en técnicas que permitan reforzar el vínculo con sus pequeños y fomentar un ambiente positivo y participativo en sus aulas. Los padres se involucran aprendiendo la técnica para utilizarla en el seno de la familia y aprovechar al máximo sus beneficios, todo ello siempre utilizando el juego como medio de aprendizaje, ya que los signos se enseñan a través de canciones y cuentos que gustan tanto a pequeños como a mayores. En este vídeo realizado por las educadoras de la Escuela Infantil Gure Leku de Bilbao se puede ver cómo los signos son sencillos y se integran muy fácilmente en canciones populares y entrañables como esta que prepararon en homenaje a Miliki cuando se formaron en la técnica. Para hacerse una idea de la cantidad de palabras que se los bebés pueden comunicar con sus manitas no hay más que disfrutar de este vídeo,donde se observa lo increíblemente bien que se puede expresar este niño con apenas 18 meses de edad, desde luego no hay duda de se trata de algo que merece la pena probar.
Miriam Escacena
Especialista en comunicación gestual
Más información: www.comunicacionconbebes.com
http://www.facebook.com/CincodeditosEnLasRozas
@milunitayyo